7 de mayo de 2012

Bonus a final de mes


En esos tiempos de crisis tener un bonus suculento a final de mes es la ambición de muchos y seguramente la alegría de pocos. Cuando trabajaba en la banca el bonus marcaba el ritmo de trabajo y en muchas ocasiones también el tipo de trabajador que uno era. Había que conseguirlo a toda cosa, por dinero, por ascenso, por prestigio, por competitividad, por lo que sea…

Parece que este sistema de incentivos se está extendiendo más allá de la banca, más allá de la vida profesional, a los colegios, las guarderías e incluso las familias. A falta de los bonus que consiguen hoy los padres y madres en sus trabajos, ahora son los más pequeños quienes traen a casa diplomas con "la estrella de la semana", "el mejor del comedor", "gold award"… (e incluso regalitos asociados a este título: muñequitas minúsculas, lápices de colores, yoyós…). Y nosotras, orgullosas madres y madrastras, lo colgamos en la puerta del frigorífico. Les reconforma más a ellos o  a nosotros?

Y es que parece que los educadores de hoy, o al menos muchos con los que yo me encuentro a diario, consideran que un sistema de recompensas motiva los niños para "hacer las cosas bien". Todo tipo de cosas son susceptibles de tener premio: comer la comida del comedor, aprender las tablas de multiplicar, leer un libro, si hasta  por hacer pis en el orinal la guarde les da una carita sonriente!!! http://blogs.elpais.com/mamas-papas/2012/05/operacion-panial.html

Lo que más me ha impresionado últimamente es ver que en casa también ocurren estas cosas.

Hace unos días fui a ver a unos amigos que tienen tres niños y la madre, orgullosa, me enseñaba los puntos que cada uno de sus hijos ha acumulado en el último mes.

"Qué es eso? Pregunto yo atónita.

"Son los puntos que tienen. Los que han ganado por ser buenos". Responde la madre con una sonrisa.

Puntitos de colores colocados en una hoja pegada detrás de la puerta mostraban un perfil de cada niño. Había puntos por lectura, por lavarse los dientes, por obedecer a la primera y un largo etcétera. El que llega antes a 10 puntos tiene premio!! Y qué premio!! Pueden elegir entre invitar a casa a un amigo a merendar o comprar un regalito en la tienda de chicos del barrio.

Y ahí estaba el "amiguito-premio" del hijo ganador sentado frente a una ensalada de frutas diciendo…"pero es que a mí me no me gusta la fruta…".

"Pues lleva cuidado con lo que dices chiquitín, que si te descuidas te quitan puntos y no puedes volver a casa con tu madre" pensé yo.

Me fui de allí con algo de miedo. Los sistemas de premio y recompensa pueden sin duda conseguir su objetivo en el corto plazo, pero qué pasa cuando las recompensas paran? Regresan los niños a la manera en que actuaban antes de que el programa empezara? Qué motiva el "buen comportamiento": conseguir el bonus o superase a uno mismo, mejorar como persona?

Además este tipo de sistemas fomentan la competitividad entre compañeros de clase y hermanos. Es un juego en que sólo uno gana. No es suficiente con hacerlo bien, hay que hacerlo mejor que los demás y más rápido.

Reconozco que fui una niña de esas que nunca recibieron un regalo por buenas notas ni por buen comportamiento. Mis padres eran más del estilo "cada uno tiene su papel en la familia y sus responsabilidades: nosotros trabajamos y tú vas al cole". "A mí me da igual lo que le compren a tu amiga Eva. A mí no me dan regalos por hacer mi trabajo".

Y eso marca, claro.

Me pregunto cómo motivar a las niñas para que les guste leer, se laven los dientes sin que tenga que repetirlo mil veces o estudien conocimiento del medio. "La peque" es buena, pero pasa bastante y hay que estar encima de ella para todo (o casi todo). Con la bebé aún es pronto. Pero si duda a ambas les marcará cómo les enseñemos a aprender y a ser personas. 

Aún no tenemos un sistema de recompensas en casa. Lo necesitamos?

3 comentarios:

  1. Elisabetta07 mayo, 2012

    No!!! Yo aun no tengo hijos (falta poco), pero me fascina el tema de la motivacion y creo que no hay nada peor que aprender a hacer una cosa por miedo a los castigos o por el deseo de ser el primero...
    Premios o castigos pueden ser utilez alguna vez, per mas util es hacerles entender a los ninos el motivo real de hacer las cosas, o porque las necessitas (lavarse los dientes), o porque asi la necessitan las personas a tu entorno (ayudar en casa), o porque tienes que pensar en tu futuro (estudiar), o porque te gusta (ir al futbol)...La motivacion tiene que ser intrinseca, no tiene que venir de fuera! Hago las cosas por las cosas mismas, no por miedo o competitividad... El miedo o la competitividad te ayudan a ganar, pero no a ser sano o feliz.

    Este libro lo esplica muy bien:

    http://www.amazon.com/Flow-The-Psychology-Optimal-Experience/dp/0061339202/ref=sr_1_1?s=books&ie=UTF8&qid=1336403075&sr=1-1

    Y tambien todos los libreo de Oliver James:

    http://www.amazon.com/s/ref=nb_sb_noss_1?url=search-alias%3Dstripbooks&field-keywords=Oliver+James

    (... al igual al tener ninos cambio idea, pero de momento asi es como pienso... y tambien son de las que no les dieron regalos para aprovar el curso...)

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  2. sabina pera08 mayo, 2012

    Hola¡¡ lo primero agradecerte esta reflexion, porque las que somos madres, a veces, sin darte cuenta vas cayendo en este sistema que en ocasiones te ayuda a salir de momentos de apuro, duros, de discusione,s o de bloqueos a los que ya no sabes como enfrentarte.
    En fin...no se dondes esta la soluciones, si alguien la encuentra que me la diga..mientras, iamgino en la flexibilidad, en el intermedio esta el punto. Es decir, no abusar de los preimos, recompensas etc.pero en ocasiones tambien ayudan a que el niño se supere y sobre todo a que la madre, madrasta vea una salida a lo que se puede comvertir en un tremendo tunel sin salida.
    No se si me explico, pero esos dias en los que le has dicho mil veces que se duche, que se lave los dientes, que se vista etc etc etc....reconozco que, aunque no me gusta demasiado, a veces le digo: ¡¡ quien termine primero tiene premioooo¡¡¡ madre mia, compañera, espero no caer en el exceso de tu amiga..aunque claro, imagino que tener 3 no es facil :)
    besos y animos. sabina

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  3. Pues ahí estamos, entre lo que sabemos que es lo mejor para motivar a nuestros peques y lo que que hacemos cuando ya hemos repetido mil veces "acábate la cena, POR FAVOR!!!". Antes de perder los nervios, reconozco que también he utilizado la frase "si te comes toda la carne, te doy un postre rico, rico"... (lo malo es que luego, ni siquiera se acaba el postre!!!!!!!!!!!!!)

    Suerte y ánimo a las primerizas y a las más expertas :)

    No dejéis de enviar vuestras opiniones y experiencias, hay siempre algo que aprender:)

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